Finales de 2024, la nueva fecha del Govern para la puesta en marcha de la T-Mobilitat

  • Las administraciones retrasan nuevamente su implantación tras asegurar que sería de cara al próximo año 2023.
  • La tarjeta acumula un retraso de más de seis años pues estaba previsto desplegarla totalmente en el año 2016.
  • Los usuarios dejarán de pagar por coronas y pasarán a hacerlo por kilómetros recorridos.
Un usuario pasando la T-Mobilitat por una máquina validadora.
Un usuario pasando la T-Mobilitat por una máquina validadora.
ACN
Un usuario pasando la T-Mobilitat por una máquina validadora.

La última fecha confiable de implantación de la T-Mobilitat en Cataluña la facilitaba hace un par de meses el director general de la Autoritat del Transport Metropolità (ATM), Pere Torres. Confiaba en que «durante 2023 desaparezcan las tarjetas de cartón magnéticas del transporte público y solo exista la T-Mobilitat», aseguraba en la comisión de Urbanisme i Mobilitat del Ayuntamiento de Barcelona. 

Este ansiado soporte para los billetes de bus, metro, tren, tranvía o Ferrocarrils (FGC) lleva acumulando seis años de retrasos (tenía que ser una realidad en el año 2016). Y 2023 parecía la fecha definitiva. No obstante, este lunes, y desde la Generalitat, el secretario general de Vicepresidència, Polítiques Digitals i Territori, Ricard Font, ha dilatado un año más este plazo temporal y sitúa la puesta en marcha definitiva de la T-Mobilitat en toda Cataluña «a finales del año 2024». Es decir, los usuarios deberemos esperar todavía más de dos años para desterrar los actuales abonos de cartón analógicos.

Este anuncio sí que ha venido acompañado de un movimiento previo por parte de la Generalitat que se concretó el pasado viernes: el Departament de la Vicepresidència i de Polítiques Digitals i Territori licitó, por importe de 21,6 millones de euros, las máquinas validadoras de la T-Mobilitat, que se instalarán en autobuses urbanos e interurbanos, tranvía, estaciones de Rodalies Renfe y de FGC.

El usuario solo tendrá que usar una tarjeta, verá que paga exclusivamente por kilómetros recorridos y comprobará que recibe una bonificación por el uso habitual

Font ha especificado este lunes que, si bien, este soporte ya está operativo solo con algunos títulos de transporte (T-Usual y T-Jove, y en breve el de la T-Casual) en los 36 municipios que conforman el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB), no será hasta finales de este año o principios de 2023 cuando «las siete coronas metropolitanas» en las que se divide el servicio de transporte público «funcionen con la T-Mobilitat». Son casi 300 municipios.

Otoño de 2023: el fin de los abonos de cartón y paso al chip

El secretario general de Vicepresidència también ha avanzado que, en cálculos de la Generalitat, los actuales billetes y abonos analógicos de cartón con banda magnética dejarán de funcionar en otoño del año que viene. Y que en como máximo dos o tres meses, estos darán paso a la tarjeta T-Mobilitat, recargable, dotada de chip, y que inaugurará un nuevo método para pagar por trayecto: hacerlo según los kilómetros recorridos en transporte público y no como hasta ahora, según la corona metropolitana de origen y destino del viaje. 

«La gente dejará de pagar por coronas y pagará por kilómetros recorridos, con bonificaciones por longitud del trayecto y para usuarios habituales», ha remarcado el responsable. En resumen, ningún usuario pagará más que ahora por un mismo viaje pero sí que los habrá que pagarán menos.

Tarifa plana en Barcelona y en 10 kilómetros a la redonda

Aunque la Generalitat prevé que en Barcelona ciudad y en un entorno de 10 kilómetros a la redonda de la capital catalana exista una tarifa plana y que, a partir de este límite, el precio del trayecto se irá incrementando según la distancia recorrida entre dos puntos en línea recta.

El contrato que dio origen al ambicioso proyecto de implantación de la conocida como T-Mobilitat se firmó hace ahora ocho años, en 2014, entre las empresas Caixabank, Indra, Fujitsu y Marfina con el nombre de Soc Mobilitat. De hacerse realidad en el conjunto de Cataluña en el plazo que ahora promete el ejecutivo catalán, el proyecto se completaría una década después de perfilarse.

Las ATM de cada una de las cuatro provincias catalanas irán integrando comarcas que aún no estaban adscritas. Las del Alt Pirineu y Aran se incorporarán este año al sistema tarifario de Lleida, lo mismo que la Garrotxa al de Girona. Terres de l’Ebre mantendrá su tarifa plana hasta 2024. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento